Ayer, día 8 de Septiembre, nos dimos una buena paliza, aunque altamente satisfactoria. A las cinco de la mañana nos levantamos y a las cinco y media carretera y manta hacia Talavera los cuatro: Valeriano, Antonio, Marcos y yo. Trescientos kilómetros con parada en Mérida para juntarnos con los hermanos Pascual, que venían desde Almendralejo.
Nada más llegar, saludos y café con churros.
A jugar la primera partida. Estábamos cerca de treinta jugadores y el metajuego parecía muy variado.
El ambientillo antes de empezar la primera ronda.
PRIMERA PARTIDA.
MOI - Eldar Oscuros con aliados tau.
MISIÓN - Los grandes cañones no descansan
DESPLIEGUE - Asalto de vanguardia
Mi oponente llevaba una lista con nueve ponzoñas ocupados por un par de escuadras de tres legítimos y por escuadras de tres atormentados. El apoyo consistía en comandante tau con tres apocalipsis y drones, diez kroots y una cataclismo.
Había un objetivo en el centro, dos en mi zona de despliegue y otros dos en la suya.
Desplegando las tropas.
Primeros movimientos Eldar Oscuros.
Empecé yo y rápidamente nos enzarzamos en un cruce de disparos destinado a eliminar los transportes del contrario. La baja efectividad de mis lanzas y blásters y el hecho de concentrar mucho fuego en las apocalipsis en los dos primeros turnos (con una total falta de éxito) provocaron que hacia el final de la partida mis tropas, ya a pie, estuvieran en desventaja ante tres o cuatro ponzoñas y los tau. En ese último turno perdí catorce guerreros de tres escuadras que ocupaban tres objetivos.
Las apocalipsis tanteando las distancias.
Los eldar oscuros al asalto, estrellándose contra las armaduras tau.
En mi flanco derecho la cosa iba algo mejor, pero la cataclismo acecha al fondo.
Últimos momentos, poco antes del descalabro definitivo de los Eldar Oscuros.
La armadura cataclismo kroot. Una conversión de mi oponente.
Perdí 12-7, pero la diferencia de puntos era de unos escasos 200 puntos de victoria, lo que da cuenta del castigo que nos dimos mutuamente.
SEGUNDA PARTIDA.
MARIO - Guardia Imperial.
MISIÓN -Purgar al alienígena
DESPLIEGUE - El amanecer de la guerra.
No era el mejor ejército contra el que enfrentarse en aniquilación: cinco chimeras (psíquicos, mando de pelotón y tres escuadras de veteranos), un leman rus executioner, dos hidras, una mantícora y tres vendetas, además de un enorme pelotón de guardias.
Para que todo fuese aún mejor, me robó la iniciativa. A partir de ahí todo fue mal. Las lanzas oscuras no funcionaron y no conseguía hacerle nada a sus vehículos, con lo que los ponzoñas no podían hacer nada tampoco. A un chimera en concreto le disparé unos once disparos en tres turnos sin conseguir nada. Poco a poco me fue destruyendo los antitanques hasta que llegó un momento en el que casi no me quedaban miniaturas. Solo había destruído un chimera y unos cuantos psíquicos.
Perdí 20-0 por asolamiento.
La cosa iba mal. Destrucción en mis filas y nada en las suyas. Y las vendettas aún no habían llegado.
Paramos un par de horas para comer, que empleamos en ir a un MacDonalds y en descansar tomando unos cafés y comentando las jugadas de la mañana. Bueno, menos Valeriano que se fue, ojo al dato, a "echarse un ratino al coche". Luego dice que yo estoy mayor. Vivir para ver.
Badajoz Team.
TERCERA PARTIDA.
DANIEL - Ángeles Sangrientos.
MISIÓN -Reliquia
DESPLIEGUE -Yunque y martillo
Una lista muy extrema, con tres land raiders cruzados, dos cañoneras stormraven, un vindicator, tres escuadras de asalto de cinco marines, un bibliotecario exterminador y diez exploradores.
El despliegue me favorecía, pero los land raiders son duros. Las lanzas volvieron a fallar al principio y como mucho hacía superficiales. Intenté acercar a los legítimos para que usaran las granadas, pero sus transportes cayeron. Los land raiders estaban peligrosamente cerca del objetivo y las cañoneras empezaron a salir. Sin embargo yo estaba recibiendo pocas bajas y la saturación de lanzas empezó a tener éxito. Un land raider cayó y la segunda cañonera fue interceptada por la línea aegis. Empecé a avanzar con la infantería hacia la reliquia y el segundo land raider cayó (aunque en la explosión se llevó por delante a ocho guerreros y legítimos). Los marines bajaron y los ponzoñas empezaron a funcionar, pero las servoarmaduras hicieron su trabajo. Aún así cayeron siete marines y cuatro exploradores. La partida terminó sin que ninguno tuviera la reliquia. Debí de haber avanzado antes y cuando se acabó el tiempo aún no había llegado.
Últimos momentos de la partida. Nos pegaba el sol de lo lindo...
Gané 10-9. Pese a que mi oponente tenía un punto por "primera sangre" yo había eliminado 900 y pico de puntos de ejército más, con lo que ganaba dos puntos que anulaban el suyo y me daban ventaja.
FINAL.
El equipo obtuvo resultados dispares. Javi quedó quinto con sus marines del caos aliados con necrones, Valeriano octavo con eldars, Marcos y sus necrones en decimotercera posición, seguido de David con necrones. Yo quedé el dieciocho y Antonio el veintiséis.
David se llevó el premio al ejército mejor pintado y Marcos y Valeriano se llevaron premio en el sorteo (se sortearon ocho cajas de miniaturas, creo recordar).
David, feliz, recoge su premio al ejército mejor pintado del torneo.
El ejército de David.
El ganador, que se deshizo de Valeriano y de Javi, en segunda y tercera ronda respectivamente, fue Félix Porras con un ejército de demonios capaz de lanzar multitud de poderes por turno. Os dejo fotos que hizo Valeriano durante el torneo (algunas de las anteriores tambien son suyas).
Puños imperiales.
Loe Eldars de Valeriano, con los dos caballeros espectrales, en acción.
Marcos se enfrentaba a otros dos caballeros espectrales.
David tirando dados.
Malos momentos para los Puños Imperiales.
¿Cómo pueden volar estos gordos dragones? Interesante conversión.
Marcos explicando a Moi alguna movida necrona.
Las huestes de Valeriano.
Javi en plena faena en la tercera ronda.
David contra dos torres.
¿Antonio está intimidando a su oponente?
Los hermanos Pascual. Javi con cara de circunstancias...
Bonitos eldars.
Un día fantástico, una organización perfecta (como siempre) y un ambiente muy bueno. Donde más se aprende es en torneos, y salir y ver caras y miniaturas nuevas siempre es bueno también. Personalmente iba con el objetivo de evitar que me asolaran en las tres partidas y me las apañé incluso para ganar una, así que quedé conforme. Y era la segunda vez que iba con todo el ejército pintado, así que doble orgullo personal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario